El comportamiento criminal es el resultado de una compleja interacción entre factores genéticos y ambientales. Aunque no hay un perfil único para todos los delincuentes, diferentes estudios a nivel internacional han identificado ciertos factores de riesgo que pueden aumentar la probabilidad de que un niño desarrolle comportamientos criminales en el futuro. En este artículo, analizaremos algunos de los comportamientos que presenta el perfil de un criminal desde que es niño.
Comportamiento disruptivo
Los niños que tienen problemas para controlar su comportamiento y emociones, como las explosiones de ira o la falta de autocontrol, tienen más probabilidades de desarrollar problemas de conducta en la adolescencia y la edad adulta. Este tipo de comportamiento disruptivo puede incluir el acoso escolar, la agresión física y la destrucción de la propiedad. Además, pueden tener dificultades para seguir reglas y límites, lo que puede llevar a problemas con la ley en el futuro.
Problemas familiares
Los niños que crecen en un ambiente de hogar inestable o disfuncional, como el abuso físico o emocional, la negligencia o el abandono, tienen más probabilidades de desarrollar problemas de conducta en la adolescencia y la edad adulta. Estos niños pueden sentirse desatendidos o no valorados, lo que puede llevarlos a buscar atención a través de comportamientos inapropiados o ilegales.
Falta de empatía
La falta de empatía es una característica común entre los delincuentes. Los niños que no muestran preocupación por los sentimientos de los demás y no tienen la capacidad de ponerse en el lugar de los demás pueden tener dificultades para desarrollar relaciones saludables y pueden estar más inclinados a comportamientos antisociales.
Falta de respeto por la autoridad
Los niños que no tienen respeto por la autoridad, incluyendo a los padres, los maestros y la policía, tienen más probabilidades de desarrollar problemas de conducta en la adolescencia y la edad adulta. Pueden tener problemas para seguir las reglas y los límites, y pueden resistirse a cualquier tipo de control. Esta falta de respeto por la autoridad puede llevar a comportamientos ilegales y delictivos.
Uso temprano de drogas y alcohol
El uso temprano de drogas y alcohol puede ser un indicador temprano de problemas de conducta en la adolescencia y la edad adulta. Los niños que experimentan con drogas y alcohol tienen un mayor riesgo de convertirse en adictos y de tener problemas legales relacionados con el abuso de sustancias.
En resumen, el perfil de un criminal desde que es niño puede incluir comportamiento disruptivo, problemas familiares, falta de empatía, falta de respeto por la autoridad y uso temprano de drogas y alcohol. Si bien, no todos los niños con estas características se convertirán en delincuentes, es importante prestar atención a estos comportamientos y buscar ayuda temprana si es necesario trabajar para abordar estos problemas a una edad temprana, podemos ayudar a prevenir el desarrollo de conductas delictivas en la adolescencia y la edad adulta.